Puede que sientas que tienes un currículum y unas habilidades de entrevista perfectas, pero eso no es suficiente para conseguir el trabajo de tus sueños. De hecho, en algún momento de casi todas las entrevistas de trabajo, el responsable de la contratación te preguntará por tus puntos débiles y cómo piensas superarlos. Incluso si estás seguro de ti mismo y preparado para esta pregunta, puede resultar confusa.
¿Cómo debe responder? ¿Admites que tienes un punto débil? ¿Cuál es una buena respuesta a esta complicada pregunta? El truco está en entender por qué el entrevistador hace esta pregunta y luego dar una respuesta que no les haga dudar de su contratación. Al fin y al cabo, nadie es perfecto, así que ¿qué debe decir cuando le pregunten por sus puntos débiles? Veamos las mejores estrategias para responder a esta difícil pregunta en una entrevista de trabajo.
Saber por qué se le pregunta
Los entrevistadores no hacen preguntas de improviso. Intentan conocerle mejor y averiguar si es usted la persona adecuada para el puesto. Antes de llegar a la entrevista, el empleador ya habrá investigado sobre ti, así que puedes suponer que ha leído tu currículum. Si hay algo en tu currículum sobre lo que tienen curiosidad, puede que te pregunten sobre ello en la entrevista. Esta es una oportunidad para aclarar cualquier malentendido o idea errónea sobre usted como candidato.
Es posible que su entrevistador le haya hecho esta pregunta porque quiere entender cómo es usted como persona. La mayoría de las personas no son perfectas, por lo que el entrevistador quiere saber si tienes algún punto débil que pueda afectar negativamente a tu rendimiento laboral. Quiere saber que conoce sus áreas de mejora y que está dispuesto a trabajar en ellas. Esta pregunta también es una forma de que el entrevistador vea cómo manejas el estrés y la presión.
Quieren saber si te pones nervioso o si mantienes la calma bajo presión. Quieren saber si eres una persona tranquila y calmada o si te estresas fácilmente. Quieren saber si eres capaz de pensar con claridad y dar una respuesta que les resulte satisfactoria. Quieren saber si es una persona a la que se sentirán cómodos contratando.
Admitir una debilidad que no es profesionalmente perjudicial
En primer lugar, asegúrese de que la debilidad que admite no es perjudicial para su reputación profesional. Por ejemplo, si estás haciendo una entrevista de trabajo como médico, pero admites que no se te dan bien las matemáticas, no es una buena respuesta. Aunque sea cierto, es definitivamente perjudicial para tu carrera.
Cuando decidas qué punto débil admitir, ten en cuenta que el entrevistador está buscando un punto débil que puedas superar. No quieren contratar a alguien que sea completamente incompetente en todo. En cambio, buscan a alguien que pueda admitir una debilidad y explicar cómo la superará.
Un buen ejemplo de una debilidad aceptable es ser desorganizado. En algunos trabajos, hay que ser extremadamente organizado y tener todo perfectamente planificado. En otras profesiones, ser desorganizado es casi aceptable. No querrás admitir una debilidad que te impida hacer tu trabajo.
La confianza es la clave
Tienes que demostrar a tu entrevistador que eres digno de confianza. Esto significa que debe ser honesto, pero no demasiado transparente. No es conveniente que describas detalladamente todos tus puntos débiles. Esto no demuestra que seas digno de confianza. Por el contrario, demuestra que no estás seguro de ti mismo y que no confías en tus capacidades.
Si puede, céntrese en un punto débil que no sea relevante para el puesto. Por ejemplo, puede ser que esté haciendo una entrevista para un puesto de dirección y admita que no se le da bien hablar en público. Aunque es un punto débil, no es algo que le impida realizar un trabajo de dirección.
Sé honesto, pero no seas demasiado transparente
Cuando respondas a esta pregunta, sé honesto y confiado, pero ten cuidado de no ser demasiado transparente. No querrás dar la impresión de que estás intentando engañar al entrevistador. También debe evitar ser demasiado inespecífico. No debe limitarse a decir que no se le da bien todo. Se espera que tengas puntos débiles, pero también quieres mostrar que tienes puntos fuertes. Quieres demostrar que eres una persona polifacética.
Por ejemplo, es posible que estés haciendo una entrevista para un trabajo de médico, pero que se te den fatal las matemáticas. Aunque esto es un punto débil, no es algo que le impida hacer el trabajo. Puede admitir esta debilidad, pero luego acompañarla de una fortaleza. Por ejemplo, puedes decir que se te da muy bien trabajar en equipo y ayudar a los demás. De este modo, demostrarás que tienes un punto débil, pero que no te impide hacer el trabajo.
Vuelve con un plan de acción
Después de admitir tu debilidad, puedes utilizar tu seguimiento para mostrar cómo vas a superar esta debilidad. Esta es una gran oportunidad para demostrar a tu jefe de contratación que eres capaz, inteligente y consciente de ti mismo.
Por ejemplo, si tu debilidad es la desorganización, puedes seguir con una solución como crear una lista de tareas cada noche antes de irte a la cama. De este modo, estarás preparado para organizarte al día siguiente y podrás centrarte en tu trabajo.
También puedes seguir con un plan de acción para un punto débil que realmente tengas. Por ejemplo, si tienes una debilidad en la oratoria, puedes seguir con algo como tomar un curso de oratoria o pedirle a un amigo que te ayude a mejorar tu confianza.
No olvides terminar con una nota positiva
Por último, no olvides terminar tu respuesta con una nota positiva. Tu entrevistador quiere saber que eres capaz, confiado y consciente de ti mismo. No quieres dar la impresión de ser negativo o de ser alguien demasiado autocrítico.
Has terminado tu respuesta con una nota positiva mostrando cómo vas a superar tu debilidad. Pero también quieres terminar tu respuesta con una nota positiva agradeciendo a tu entrevistador que te haya hecho la pregunta. Esto demostrará que estás agradecido de que te hayan preguntado y dejará una impresión positiva en el entrevistador.
De este modo, no sólo quedará satisfecho con tu respuesta, sino que entenderá que eres capaz, confiado y que serás una gran incorporación a su equipo. Si haces esto, tienes casi garantizado que conseguirás el trabajo.
Conclusiones
Cuando te entrevistan para un trabajo, te juzgan por algo más que tu currículum. El director de contratación querrá saber si eres una buena persona para su empresa, y eso empieza por conocer tus puntos fuertes y débiles. Quieren saber si eres lo suficientemente consciente de ti mismo como para admitir que tienes dificultades y si tienes la suficiente confianza para explicar cómo vas a superar esas debilidades.
Quieren que seas sincero, pero también quieren que tengas cuidado con lo que decides admitir. No quieren que parezca que estás intentando engañarles o que eres demasiado negativo contigo mismo. Con estos consejos, estarás bien preparado para responder a esta difícil pregunta y darás la impresión de ser lo suficientemente seguro, inteligente y digno de confianza para que te contraten.
