¿Estás preparado para superar la entrevista? Ya tienes tu currículum, tu carta de presentación y tus referencias. También estás armado con las respuestas a las preguntas más comunes de las entrevistas de trabajo como «¿cuáles son tus puntos fuertes y débiles?» ¿Cómo no van a contratarte? Has superado la primera entrevista, ahora llega la prueba final. Antes de que te des cuenta, estarás en esa fase final de las entrevistas de trabajo.
Ya sabes, ese momento incómodo en el que tienes que venderte y demostrar por qué deberían contratarte por encima de otros candidatos. Para ello, debes prepararte y armarte con respuestas para algunas de las preguntas más comunes que se hacen durante una entrevista. Aquí tienes una lista de algunas de estas posibles preguntas y cómo puedes responderlas:
Háblame de ti
Pedirle a un candidato que le hable de sí mismo es una buena manera de empezar la entrevista y conocer algunos datos básicos de la persona. Recuerda que es tu oportunidad de demostrar por qué eres la mejor persona para el puesto. Puedes hacerlo destacando tus habilidades, experiencia y formación.
También puedes incorporar información sobre cómo encontraste tu pasión por la enfermería. Si te presentas a una entrevista para un puesto en una especialidad en la que siempre has querido trabajar, es aún más importante que muestres tu pasión por ese campo específico. Deberás asegurarte de resaltar cualquier certificación o habilidad especial que tengas que sea beneficiosa para el trabajo. También puede aprovechar esta oportunidad para abordar cualquier declaración negativa en su currículum.
¿Por qué dejas tu trabajo actual?
Si vas a dejar tu trabajo, debes asegurarte de tener una buena razón para hacerlo. Tanto si te vas porque estás agotado como si te han ascendido, debes tener una razón sólida para dejarlo. Asegúrate de tener una respuesta preparada para esta pregunta, ya que es muy común. No querrás dar la impresión de que dejas tu trabajo porque no te gusta. También puedes utilizar esta pregunta para demostrar por qué estás preparado para el nuevo trabajo. De nuevo, debes asegurarte de tener una buena razón para dejar tu trabajo. Si te vas porque estás agotado, no digas que te vas porque quieres un nuevo reto. Quieres irte porque has logrado todo lo que podías en tu trabajo actual y estás listo para tener más responsabilidades.
¿Por qué te hiciste enfermero?
Esta es una gran pregunta para hacer al entrevistador. Puedes aprovecharla para destacar tu pasión por la enfermería. Si un ser querido estaba en estado crítico y decidiste convertirte en enfermera, es una historia fantástica para contar durante la entrevista. También es una buena forma de mostrar cómo ha evolucionado tu carrera de enfermería y cómo has crecido a lo largo de ella.
Asegúrate de incluir cualquier investigación que hayas realizado sobre enfermería, así como cualquier curso o certificación que hayas tomado. Es una forma fantástica de mostrar tu pasión y tus conocimientos en el campo de la enfermería.
¿Cuál es tu mayor fortaleza?
Todo el mundo tiene puntos fuertes y débiles. En lugar de centrarte en tus puntos débiles, debes centrarte en tus puntos fuertes. Puedes hablar de cómo has utilizado esos puntos fuertes para alcanzar los objetivos que te has marcado en la vida. También puedes utilizar esta pregunta para hablar de las habilidades que tienes y que serían beneficiosas para el trabajo.
Si estás haciendo una entrevista para un trabajo de enfermería, puedes hablar de cómo has utilizado tus puntos fuertes para devolver la salud a los pacientes. También puedes utilizar esta pregunta para hablar de cualquier función de liderazgo que hayas desempeñado o de cualquier proyecto relacionado con el trabajo que hayas realizado. Recuerda que debes mantenerte alejado de las afirmaciones negativas que puedan aparecer en tu currículum.
¿Cuál es su mayor debilidad?
Hacer esta pregunta durante una entrevista es muy poco profesional. Aunque un entrevistador te pregunte esto, no debería esperar una respuesta sincera. Asegúrate de alejarte de este tipo de preguntas y céntrate en algo positivo. Puedes hablar de cómo has aprendido de tus fracasos anteriores y cómo has aplicado esas lecciones en tu vida.
También puedes hablar de cómo has utilizado esas debilidades para mejorar y cómo las has aplicado en tu vida. También puedes hablar de cómo has utilizado esas debilidades en tu vida como puntos fuertes. Por ejemplo, si estás haciendo una entrevista para un puesto de enfermera de cirugía y tienes experiencia en sutura, puedes hablar de cómo has aprendido de tu debilidad y la has aplicado a tu vida como enfermera de cirugía.
¿Cuáles son tus objetivos profesionales?
Esta es otra pregunta fantástica para hacer al entrevistador. Es una oportunidad para que destaques tus habilidades y objetivos en el campo de la enfermería. También puedes aprovechar esta oportunidad para abordar cualquier afirmación negativa de tu currículum.
Puedes hablar de los objetivos que tienes en el campo de la enfermería y de cómo piensas alcanzarlos. También puedes hablar de cualquier certificación o habilidad especial que tengas que pueda beneficiar al trabajo. También puedes hablar de tus aspiraciones en el campo de la enfermería. Asegúrate de ser específico cuando respondas a esta pregunta.
¿Tiene alguna última pregunta para mí?
Esta es la oportunidad perfecta para mostrar tu interés por el trabajo. Puedes aprovechar esta oportunidad para destacar cualquier habilidad o meta que quieras alcanzar en el campo de la enfermería. También puedes aprovechar esta oportunidad para responder a cualquier afirmación negativa de tu currículum. Puedes hacer preguntas específicas sobre el trabajo y sobre cómo puedes beneficiar a la empresa. Asegúrate de ser reflexivo cuando hagas las preguntas. No quieras pensarlo demasiado y preguntar algo que sea irrelevante.
Recuerda que la entrevista es tu momento para brillar. Tienes que demostrar por qué eres la mejor persona para el puesto. Tienes que hacer saber a tu entrevistador que te interesa el trabajo y que estás dispuesto a trabajar. En una entrevista, tienes que estar preparado para todo. Esto significa que tienes que estar preparado y saber qué esperar durante el proceso de la entrevista. Tienes que estar preparado para responder a las preguntas habituales de las entrevistas de trabajo y demostrar por qué eres la mejor persona para el puesto.
