No hay una cifra exacta, pero según los expertos, para estar tranquilo financieramente, hay que tener ahorrado el equivalente a 3 a 6 meses de gastos. Esto nos permitirá cubrir imprevistos como una enfermedad, un despido o una situación de emergencia. Además, es importante tener en cuenta que el ahorro debe estar invertido en un fondo de emergencia, que sea lo suficientemente líquido para poder acceder a él en caso de necesidad.
No hay una cantidad exacta de dinero que deba tener en su cuenta de ahorros para tener tranquilidad financiera. Sin embargo, según los expertos, el equivalente a entre 3 y 6 meses de gastos ahorrados es una buena cantidad. Esto le permitirá cubrir imprevistos como una enfermedad, un despido o una situación de emergencia.
¿Cuánto dinero necesita para estar tranquilo?
El enfoque más obvio es simplemente mirar tus gastos mensuales y multiplicarlos por 12 para determinar un presupuesto anual. Si quieres tener 3 meses de gastos ahorrados, simplemente suma todos tus gastos a lo largo del año y divide esa cantidad entre 3. Sin embargo, hay algunos factores que pueden complicar este enfoque. En primer lugar, puede ser que tengas deudas, lo que reducirá la cantidad de dinero que tienes que ahorrar. En segundo lugar, es importante tener en cuenta los impuestos, así como los costes de la atención sanitaria para usted y su familia.
Por último, hay algunos gastos adicionales de los que mucha gente se olvida. Por ejemplo, es posible que tenga que sustituir su coche antes de lo previsto porque tiene un kilometraje superior a la media, o que uno de sus hijos decida ir a una universidad privada. Para cubrir este tipo de gastos, es posible que necesite tener ahorrados más de 3 meses de gastos.
¿Por qué es importante tener un fondo de emergencia?
Las emergencias no son acontecimientos raros: Una encuesta realizada por la compañía de seguros Aviva reveló que casi un tercio de los ciudadanos británicos espera enfrentarse a un contratiempo financiero importante en su vida, y el 39% espera enfrentarse a dos o más. Pero aunque los imprevistos son habituales, muchas personas no tienen un fondo de emergencia para cubrirlos. Esto puede llevar a un ciclo de endeudamiento, en el que se recurre a las tarjetas de crédito para pagar gastos básicos como las reparaciones del coche y las facturas médicas.
¿Cómo asegurarse de que su fondo de emergencia tiene suficiente liquidez?
Un fondo de emergencia líquido le permitirá cubrir gastos inesperados y minimizar el daño a su puntuación de crédito. Al mismo tiempo, sin embargo, es importante tener cuidado de no mantener el dinero inmovilizado en inversiones de bajo rendimiento.
La regla general es que debe poder acceder al dinero de su fondo de emergencia sin tener que vender alguna otra inversión. Hay varias formas de conseguirlo. En primer lugar, muchas personas optan por mantener su fondo de emergencia en una cuenta de ahorro de alto rendimiento, a la que es fácil acceder en caso de emergencia. Si tiene que elegir entre una cuenta de ahorro y un CD, opte por la cuenta de ahorro.
Los CD suelen pagar menos que las cuentas de ahorro y es menos probable que necesites el dinero con la suficiente frecuencia como para que merezca la pena el menor tipo de interés. También puedes mantener una parte de tu fondo de emergencia en inversiones menos líquidas, como acciones o un fondo de inversión, siempre que tengas una cantidad equivalente a tu fondo de emergencia en una cuenta líquida para poder acceder a ella fácilmente.
El equivalente a entre 3 y 6 meses de gastos ahorrados le permitirá cubrir imprevistos como una enfermedad, un despido o una situación de emergencia, y es importante tener en cuenta que los ahorros deben invertirse en un fondo de emergencia que sea lo suficientemente líquido para poder acceder a él en caso de necesidad.
Al mismo tiempo, es importante tener en cuenta los impuestos, así como los costes de la asistencia sanitaria para usted y su familia, y es posible que necesite tener un fondo de emergencia mayor si tiene deudas. Un fondo de emergencia líquido le permitirá cubrir gastos inesperados y minimizar el daño a su puntuación de crédito.